Este tipo de enfermedades en su mayoría son genéticas y afectan actividades tan importantes como movilidad, equilibrio, habla, respiración y función del corazón. Algunas de los causantes pueden ser los accidentes cerebrovasculares (ACV), tumores, virus, toxinas, alcoholismo…aunque en ocasiones las causas también puedes ser desconocidas.
Algunas enfermedades neurodegenerativas son: Enfermedad de Alzheimer, Enfermedad de Parkinson, Demencia con cuerpos de Lewy, Ataxia de Friedreich.
Existen más, pero en este artículo vamos a describir las anteriormente citadas.
Enfermedad de Alzheimer: Demencia común entre las personas mayores. Afecta a la capacidad de la persona para desarrollar sus actividades diarias e impide la autonomía del afectado.
Su comienzo es lento y afecta a las partes del cerebro que controlan memoria, lenguaje y pensamiento. Comienza el deterioro cognitivo progresivo. Pasado un tiempo el afectado puede no reconocer a sus familiares, puede olvidar secuencias diarias tan sencillas como peinarse, puede volverse agresivo y ansioso.
Ningún tratamiento puede detener la enfermedad, aunque sí que ayudan a enlentecer sus síntomas.
Enfermedad de Parkinson: Es un trastorno del movimiento que sucede cuando las neuronas no producen suficiente dopamina. Existen casos genético aunque una gran mayoría no lo son.
Su comienzo es lento afectando a un lado del cuerpo, en su desarrollo afecta a ambos lados. Se aprecia lentitud de movimientos, problemas de coordinación y equilibrio, temblores y rigidez de brazos, piernas y tronco. A medida que los síntomas avanzan los afectados pueden tener dificultad para caminar y desarrollar rutinas diarias, también pueden tener problemas al masticar, al hablar, depresión o trastornos del sueño.
Demencia con cuerpos de Lewy: Causa común de demencia en ancianos. Se acumulan estructuras llamadas cuerpos de Lewy en ciertas áreas cerebrales. Esta acumulación anormal puede causar diversos síntomas como alucinaciones, confusión, rigidez, problemas de movilidad, cambios en el estado de alerta y atención.
Esta demencia es complicada de diagnosticar ya que causa síntomas similares al Alzheimer y Parkinson.
Ningún tratamiento puede detener la enfermedad, aunque sí que ayudan a controlar sus síntomas.
Ataxia de Friedreich: Afecta a la médula espinal y nervios que controlan los miembros superiores e inferiores.
Los síntomas comienzan entre 5 y 15 años, el principal es la ataxia (dificultad en la coordinación de los movimientos). Los síntomas específicos son problemas para hablar, dificultad en la marcha, debilidad muscular, movimiento involuntario de ojos, escoliosis y palpitaciones.
Tras un periodo de aproximadamente 20 años de la aparición del primer síntoma los afectados pueden necesitar silla de ruedas e incluso en casos severos terminan dependientes.
No existe cura, los fármacos pueden tratar los síntomas, los aparatos ortopédicos ayudan a desarrollar una rutina. La cirugía y la fisioterapia son convenientes en la Ataxia de Friedreich.